Crónica del Amigo Invisible Ilustrado 2020

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El 2020, fue un año sumido en el estrés de las cuatro paredes y carente de calor humano para la mayoría. Por ello, con fin de evitar las “navidades imaginarias”, en noviembre empecé a mover una iniciativa que, aunque en principio creía que se compartiría entre mis 4 amigos solamente, tuvo buena acogida: el Amigo Invisible Ilustrado. Soy Mosta, una de las ilustradoras que colabora en VdV, y aquí dejo escrita mi experiencia organizándolo, que espero que os anime para participar en 2021:

Como el nombre explica, la propuesta implicaba hacer un amigo invisible regalando una ilustración y recibiendo otra, con el fin de crear una red de ilustradores y darse a conocer en nuevos círculos. Edité una inscripción y la lancé a las afiladas garras de las redes sociales, con ayuda de amigos y el equipo de V de Vigueta. Entre todo el equipo logramos interesar a muchos y, finalmente, se apuntaron 35 personas. Mi mente fue apuñalada por un pensamiento invasor: ¿CÓMO VAS A GESTIONAR UN EVENTO CON TANTA GENTE?, pero la primera reunión consiguió acallar toda preocupación. 

La primera reunión fue el momento de la verdad, cuando aleatoriamente se asignaba el amigo invisible. En esta toma de contacto con los inscritos, la iniciativa de muchos nos ayudó a resolver como equipo dudas que habían surgido en el planteamiento primero. La creación de un drive compartido, que los archivos se subieran comprimidos para que no hubiese previsualizaciones inesperadas, la tabla con gustos y definiciones de cada uno para conocernos mejor… Entre todos maquinamos un sistema infalible para que la ilustración fuera sorpresa para todos, incluido para mí.

Terminamos la reunión con muchísima ilusión… pero los creativos ya nos conocemos, dejamos todo para el último momento. Y así, pasaron las fiestas, comenzó el 2021 con los exámenes de enero, y, como es normal, muchos no habíamos ni empezado. Cómo elegimos la fecha de intercambio de ilustraciones para alegrar el Blue Monday, aún nos quedaban unas semanas, pero fueron unos días muy intensos. 

Llegó el día, y casi todas las ilustraciones estaban subidas… ¡¿Cómo que CASI?! Algunos ilustradores se hicieron de rogar hasta el último momento, incluso alguna se perdió en la subida, pero 34 ilustraciones fueron intercambiadas en total. En la llamada casi me derrito de ilusión, porque fuimos abriendo ilustración a ilustración y se podía ver la emoción de cada artista recibiendo su regalo y respectivo amigo invisible explicando el por qué de la obra. Aquí dejo el “círculo” de ilustraciones, con el autor de cada una, y siguiendo las flechas, para quién era:

Sí, habéis contado bien, hubo un artista que se quedó sin obra en un principio. Fue el querido miembro de la revista @neufear, cuyo amigo invisible desapareció en la bruma. Pero por iniciativa del resto de participantes, este amante de los patos pudo recibir varias ilustraciones hechas por distintos creativos. 

En cuanto terminamos, no encontré palabras de agradecimiento para todas las personas que se interesaron por el proyecto, por toda la colaboración que pusieron de su parte y por la ilusión que me brindaron. En definitiva, fue una gran experiencia, que, este 2021 volveremos a repetir. Estad atentos a mis redes o a las de V de Vigueta y ¡atreveos a ilustrar!